miedos...

Y es que éste es uno de esos miedos, que te rondan como una maldición, y te atacan a traición cuando menos te lo esperas; éste es uno de esos miedos que no cuentas, que callas, que escondes bajo tu apariencia de chica dura con la esperanza de que nadie vea lo asustada que estás; porque éste es uno de esos miedos que te persiguen y te atormentan, y que ni siquiera eres capaz de sacarte a fuerza de teclear o de escribir con buena letra, porque no podrías deletrearlo aunque quisieras; porque éste es uno de esos miedos que hacen que se te pierdan las letras, que se te desordenen las palabras, dejándote indefensa, porque ni siquiera eres capaz de contártelo a ti misma; y es que éste es uno de esos miedos que te amordazan, y te hacen mirar directamente a los ojos a tu dichosa vulnerabilidad, porque hay cosas que ni tú misma podrías poner en palabras, y además, parece que las cosas si no las dices no son de verdad, y que las pesadillas, si no las cuentas no se harán realidad.




5 comentarios:

Verónica Calvo dijo...

Todos tenemos un miedo que llevamos enraizado muy adentro.
Y sí, es como bien dices: ni hablarlo, ni escribirlo, ni dejarlo dormir.
Aparece cada tanto, puntual como una indeseable visita.

Besos

Chaly Vera dijo...

Estoy seguro que debo tener miedo a algo, más en este momento no recuerdo cual es ese miedo.

Besos

Contando los sesenta dijo...

El infierno son los otros pero el miedo somos nosotros mismos.
Besos

LA ZARZAMORA dijo...

Y hay miedos que nos tienen hasta miedo... sí.

Besos, ojitos.

LaCuarent dijo...

Oh los miedos, yo les tengo terror

Besos:9