inviernos...

dicen que la primavera ha estallado en mi ciudad, pero mi pequeño drama familiar me impide notar (sentir, empatizar) lo que eso conlleva...

y veo las imagenes que las distintas televisiones tienen a bien mostrarme... y me pregunto como hemos permitido que esto suceda... y mi yo cínico me dice que ahora vivimos en un pais de derechas, y que eso tiene sus consecuencias... pero no puedo salir... las pancartas me son ajenas... y no tengo tiempo de creer en la justicia, porque el miedo que flota a mi alrededor estos días me ha hecho comprender de manera fulminante que la vida no es justa...

quizás por eso no sé si podría pedir justicia... quizás es que vuelvo a tener que salir y parar un taxi que me lleve a la puerta del hospital y fumarme un cigarrillo en siete caladas antes de entrar y pasar por la máquina de café que hay al lado de la cafetería y pulsar el botón del ascensor (recordar que en vez del cinco, tengo que pulsar el dos) y dejar las cosas en un sofá ajeno y sacar el libro que no voy a leer del bolso y esperar el relevo...
fingiendo que no veo el miedo en los preciosos ojos verdes de la abuela...

y sé que dicen que la primavera acaba de estallar en mi ciudad, pero yo sigo atrapada en este invierno... resguardada en mis silencios... intentando sobrevivir a base de tecleos inconexos...

5 comentarios:

Mercedes Ridocci dijo...

¡Como te entiendo!

Un abrazo grande, amiga.

Mercedes.

TORO SALVAJE dijo...

Los tecleos son una buena evasión del mundo que se cae a pedazos.

Saludos.

NubOsidad VaRiable dijo...

No estás sola.
FUERZA, mucha fuerza...

LA ZARZAMORA dijo...

Ni justicia, ni nada a lo que aferrarse queda ya.
Yo también salgo a fumar en este esbozo de primavera cuando la sangre me hierve...

Besos.

Gema dijo...

Siento por lo que estas pasando...me es tan familiar! Todo pasa, pero...es duro lo largo que se hace. La primavera llegará. Te lo prometo, aunque ahora sea imposible verlo.
No vea cómo me gustaría poder darte un abrazo ahora mismo...