perplejidades...

no soporto madrugar,
ni tener que dar explicaciones que no debo;
ni a esa gente que sonríe todo el tiempo.

no soporto el café cuando está tibio,
ni que se me rebele el flequillo,
ni que me interrumpan cuando hablo.

no soporto los sábados por la tarde,
ni este calor sofocante,
ni las noches en blanco.

y no soporto las sonrisas de mentiras,
ni las alegrías fingidas,
ni los halagos desproporcionados.

pero lo que de verdad no puedo soportar
es a los clientes que van a llegar tarde
y te piden que los esperes...

como si tu jornada laboral
de ocho horitas y media
no fuera suficiente.



y es que hay cosas 
que como a mí no se me ocurriría hacer,
no entiendo que otros las hagan...
qué le voy a hacer?

3 comentarios:

Ana M. dijo...

Coincido en todo. No lo soporto. ;)

Verónica Calvo dijo...

Coincidimos en muchas.
En cuanto a la gente que llega tarde y te piden que esperes... GRRRRR!!!

Besos

LA ZARZAMORA dijo...

Dónde hay que firmar???
Besos, ojitos clarividentes.