agotamientos...

y entonces
te agotas...

pasa así,
sin más,

sin que pase nada en concreto.

es pura acumulación,
puro desbordamiento.

te agotas,

y una mañana sientes
que ya no puedes más,

que no quieres dar,
ni comprender,
ni esforzarte,
ni intentarlo,
ni llegar.

te agotas,

y simplemente quieres
descansar.




3 comentarios:

Chaly Vera dijo...

Después de esperar tanto
lo mandas al diablo
lo revuelcas en el establo
y te transformas en un santo

Verónica Calvo dijo...

Totalmente de acuerdo.

Besos, querida mía

Contando los sesenta dijo...

Ah! Qué felicidad disfrutar de ese descanso reparador! Aprovechas para lavarte los ojos del espíritu, mirar otras cosas y hacia otros lados y volver con la mirada limpia para darte cuenta de que hay cosas que, simplemente, no valen la pena. O sí.
Besos.